Crítica cinematográfica

Peio Sánchez Rodríguez escribe sobre la última película de Scorsese, Silencio, que califica de obra maestra. El director la ha dirigido a partir de una novela de Shūsaku Endō, escritor japonés católico, en la que se narra la vida de un misionero portugués en el siglo XVII.

«Probablemente junto con “El árbol de la vida” de Terrence Malick nos encontremos con una de las películas de más densidad teológica en perspectiva cristiana. Lo que la coloca al lado de obras maestras de la altura de Dreyer, Bresson o Tarkovski. El apropiado “silencio” antes de su estreno ha generado una expectativa en crítica y público que no defrauda. Para los más alejados de la fe resultará una película extraña, inquietante y con probabilidad incómodamente confesante. A los creyentes que esperan una película de vida de santos misioneros y mártires les resultará decepcionante por ambigua y falta de luz cegadora, de una conversión tumbativa. Pero al que quiera pensar y creer, quizás le sumerja en un silencio habitado.» (sigue leyendo…)

En la imagen «fumie» o imagen para pisar, utilizada en Japón para descubrir cristianos católicos cuando esta religión estaba prohibida (wikipedia)